Léeme,
cuando el frío se meta en tus huesos,
o cuando el ulular del búho
te erice la piel de terror.
Léeme cuando la lluvia arrecie
y no quieras salir de tu habitación.
Léeme,
entre tus sábanas frías,
o a oscuras en tu rincón,
léeme cuando la brisa
entre por cada rincón.
Léeme cuando las hojas caducas
cubran el suelo a tu paso,
y el sonido del otoño
despierte tus sentidos adormilados.
Léeme,
cuando el crepúsculo invada tus retinas
cuando el aire puro invada tus pulmones.
Léeme cuando te sientas sólo
y no encuentres explicaciones.
Léeme,
sólo o acompañado
disfruta de mis creaciones,
porque aunque mis sentimientos sean locos
comen cocos y te causan sensaciones.
Léeme cuando quieras,
cuando más me necesites
pero por favor,
léeme y no me olvides.
No hay comentarios:
Publicar un comentario